HARO

Datos

Población: 12.203
Bodegas: 21
Hectáreas uva tinta: 1.033
Hectáreas uva blanca: 81

Estos datos se corresponden en ocasiones con cifras de años anteriores. Las bodegas referidas son aquellas que se encuentran dentro del consejo regulador, si bien en la mayoría de las poblaciones pueden encontrase numerosas bodegas donde se elabora vino de gran calidad.

Reseñas históricas

Al igual que Laguardia, abarcar en un artículo la importancia de Haro es casi imposible. Se trata de un lugar estratégico, capital de comarca, “Puerto Seco” y “Capital del Rioja” o “Costa del Vino” como así nos cuentan sus habitantes.

Los harenses son más conocidos como jarreros. Este apodo viene de una antigua tradición alfarera que allí existió (desde la ocupación árabe) y que con el tiempo derivó en el servicio del vino en jarras. Por ello, los comerciantes que allí acudían denominaban a los camareros jarreros. No en vano, un jarro es toda una institución en Haro.

Por Haro cruzan dos ríos. El río Tirón, uno de los que separa los siete valles riojanos; y el Ebro, donde allí mismo desemboca el Tirón. Un faro que alumbraba esta desembocadura y la calzada romana que por allí pasaba es el origen del nombre. De Faro, Haro.

De Haro destaca un lugar conocido como cerro de la Mota, el Castillo o la Atalaya. Se eleva sobre los ríos y fue un lugar estratégico. Allí existió un castillo y allí moraron sus “dueños”. Al igual que en toda la comarca, Haro pasó por distintas manos. Cabe destacar que cuando allí llegó Sancho IV, en el S. XIII le cambió el nombre por el de Villabona.

En los restos de su muralla, en un antiguo torreón, hoy restaurado se encuentra el museo de Arte.

Hay dos apellidos que están muy ligados a la historia de Haro: López de Haro y Fernández Velasco. A Diego López de Haro, señor de Vizcaya, le donaron Haro por sus ayudas en diferentes batallas en el S. XI. A Pedro Fernández Velasco le otorgaron el título de Conde de Haro en el S. XV y la familia mantuvo el señorío de la villa hasta el S. XIX.

Haro es paso del Camino de Santiago. Muestra de ello es el convento de los Agustinos (hoy hotel y del que hablaremos más adelante) que se construyó en el siglo XIV para atender a los peregrinos.

En el Palacio de Bendaña, hoy en ruinas y próxima su reconstrucción, la ciudad le juró fidelidad a la casa Borbón en plena guerra entre Austrias y Borbones; y en el palacio Salazar cobijó a la futura reina María Luisa de Saboya y a su hijo Luis. Por ello Felipe V la distinguió como la Muy Noble y Muy Leal.

En 1890 contó con alumbrado público eléctrico. Se puede considerar la primera ciudad española en contar con ello (aunque Jerez de la Frontera dispuso de alguna luz eléctrica meses antes). De ahí surgieron los dichos “Haro, París y Londres” y “ya estamos en Haro que se ven las luces”. En 1891 la reina Regente le otorgaría el título de ciudad.

Es una de las 7 poblaciones no capital de provincia que dispuso de oficina del Banco de España. Este hecho destaca su importancia como enclave comercial. Cuenta con numerosas bodegas centenarias y el centro de interpretación del vino.

En cuanto a monumentos destaca su puente gótico a las afueras de la ciudad, la portada de la Iglesia de Sto. Tomás y la Basílica de la Vega, patrona del pueblo y a la que se le rinde mucha devoción gracias, en parte, a la Cofradía de la Virgen de la Vega.

Otros datos curiosos de Haro es la afición taurina que todavía conserva, su plaza de toros y su equipo de Voley Femenino, que milita en la superliga femenina. Relacionado con el deporte está el proyecto de un campo de golf diseñado por José María Olazábal y que se espera esté en funcionamiento para el 2012.

Haro, en verano, dobla su población gracias al turismo, en su mayoría proveniente del País Vasco y Madrid.

Personajes Ilustres

Una historia tan rica en acontecimientos da para una lista de personajes ilustres que por allí moraron. Sin embargo voy a basar este apartado en jarreros bastante recientes.

Manuel Bartolomé Cossío (S. XIX – XX) fue historiador de arte y considerado maestro de maestros. Su obra “El Greco” es referencia indispensable para entender a este maestro de la pintura.

Lucrecia de Arana, contemporánea de Manuel, fue una cantante muy popular, sobre todo en el género de la zarzuela.

Ángel Martín Municio, investigador, llegó a ostentar el cargo de Presidente de la Real Academia de las Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y entre otras condecoraciones obtuvo la Medalla de Oro de La Rioja, la Gran Cruz del Mérito Militar y la Medalla de Honor al Fomento de la Invención.

Sin duda, el más prolífico de todos los jarreros ha sido Luis García Lecha. También conocido como Clark Carrados, Louis G. Milk, Glenn Parrish, Casey Mendoza y Elmer Evans, compuso 2.003!! novelas largas. Cultivó sobre todo el género del Western, el género bélico, el policíaco y el del terror.

Tradiciones más destacadas

La tradición más conocida de Haro es la Batalla del vino, de la que ya hablamos en un artículo anterior. Sin embargo hay otras tradiciones que tienen mucho arraigo en esta ciudad.

Alrededor de la Batalla del Vino, el día 24 de junio, San Juan, las cuadrillas pasan la madrugada alrededor de las hogueras para desayunar chocolate y moscatel antes de dar comienzo a las fiestas con el tradicional chupinazo y la tamborrada.

El 8 de septiembre se celebra la Virgen de la Vega. Misa, ofrenda de flores, degustación del primer mosto y concurso de piropos a la Virgen. A la tarde, procesión de los faroles, el tercero más antiguo de toda España.

Alrededor de esta fecha, el primer domingo de septiembre se celebra una comida de “hermandad” en los riscos del Bilibio. Y el once de septiembre “La Jira”, en la Fuente del Moro.

Otras fiestas y eventos que se viven con mucha pasión en Haro son los carnavales, el Certamen Nacional de Teatro Garnacha, la Feria de Automoción y Maquinaria Agrícola, y la Rioja Party.

Leyendas

¿Cómo llegó la Virgen de la Vega a Haro? Se cuenta que un grupo de cristianos riojanos que habitaban en la vega de Granada huyeron de la invasión musulmana con una imagen de la Virgen que llevaron hasta las orillas del Ebro, en Haro. No es la imagen actual que se conserva que es posterior, de estilo gótico.

Una tradición el día de la Virgen es la de repartir espigas de trigo bendecidas conmemorando un milagro atribuido a la patrona. Se cuenta que para ayudar a una viuda que se encomendó a ella, la Virgen convirtió la cebada que ella tenía en trigo para que así pudiera pagar la renta y tuviera simiente para el año siguiente.

El Rey García Sánchez de Nájera quiso llevar los restos de San Felices a Nájera. Encomendó la labor al obispo de Álava. Al abrir la sepultura la cara del obispo se deformó y una gran tormenta se inició lo que provocó que se cancelara el traslado.

Establecimiento recomendado

En esta ocasión me resulta muy difícil recomendar un establecimiento en concreto. Son muchas las bodegas y hoteles (incluido el camping), e innumerables los establecimientos de hostelería. Por ello voy a recomendar una zona: la Herradura.

Desde la Plaza la Paz y hacia la Atalaya se esconde una joya gastronómica de primer nivel. En la herradura nos encontramos con dos caras o quizás tres. La de día, la de noche y la comercial. Los amantes del vino, del buen comer y de la fiesta encontrarán en esta parte una buena oportunidad de disfrutar de ello.

De día tiendas especializadas en vinos y licores, de recuerdos,...; bares con pinchos y restaurantes con buenos platos. Tradicionales y de alta cocina.

De noche, tiempo de ocio. Todos los tipos de música, todas las edades. Una buena oportunidad de conocer la gente de una ciudad que te recibirá con los brazos abiertos.

Mi consejo

Mi consejo es visitar Haro un día que no caiga en fin de semana para así disfrutar mejor de sus calles. El paseo al barrio de las bodegas es una experiencia que relaja y te envuelve en un mundo distinto. Es como retroceder 100 años en la historia y respirar el aroma del vino que respiraron los primeros grandes bodegueros de la región.

Más información:
info@paseosdivinos.com ; www.paseosdivinos.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario